jueves, 9 de abril de 2009

Estética Cotidiana 3 y Ultima


Tercera Parte

Estética Cotidiana
Excélsior, jueves 29 de Agosto de 1991



Analfabetismo Artístico
Juan Acha



En comparación con los admiradores del espectáculo futbolístico, los aficionados del arte son incultos y analfabetas funcionales. Mientras los primeros saben más del citado deporte y de su historia, los otros apenas si rumian unas vaguedades acerca de su afición. Entonces ¿Por qué ellos visitan exposiciones de arte?
La gran mayoría de ellos va hoy a los museos y galerías de arte, empujada por el consumo masivo: suplantar el placer estético por el agrado de ver algo que los medios masivos han declarado importante. Siguen en cantidad quienes buscan solazarse estéticamente con lo pictórico. Se limitan, pues, a gozar toda confirmación de su gusto o sensibilidad, la cual no necesita aprender un alfabeto especial: simplemente ella opera según sus preferencias, que son hábitos lentamente inculcados o adquiridos sin necesidad de una alfabetización estética.
En pocas palabras, toda persona –analfabeta o no- es capaz de exclamar “me gusta” o “no me gusta” ante cualquier obra de arte. Esto, parte de que nuestros aficionados a las artes plásticas, lo son únicamente de la pintura y buscan solazarse hasta con lo pictórico de la escultura y de la arquitectura. Constituyen excepciones quienes saben leer lo escultórico y lo arquitectónico, en tanto escasean los lectores de lo artístico de lo pictórico. Abunda, en suma, el analfabetismo artístico. Veamos en que medida.
En el D.F. registramos 150 mil asiduos visitantes a las exposiciones de arte en sus principales museos. Una buena cifra, si la comparamos con la de los países europeos. Pero los verdaderos lectores de lo artístico no pasan de unos 150 mil, si nos atenemos al analfabetismo artístico que cabe deducir de algunos hechos notorios: La escasez de textos sobre pintura en nuestros diarios, más la de los lectores de estos, la imposibilidad de tener revistas de arte con un tiraje de 7 mil, los libros de arte con un tiraje de 2 mil a 3 mil tarda 10 años en venderse, aunque una buena parte se exporta. Quizás consumamos unos 5 mil ejemplares de revistas extranjeras de arte, número que tal vez sea el de los coleccionistas.
Total: Él número de aficionados del arte que leen nos impiden producir revistas y libros de arte. Los aficionados al fútbol, en cambio, disponen de varias páginas en los diarios y de muchas revistas especializadas. Estos leen, mucho más que los aficionados a las artes plásticas, no obstante ser estas más complejas.
El analfabetismo artístico no es nada malo parta el consumo estético ingenuo y vegetativo que solo busca confirmaciones de su gusto. En realidad, “animaliza” a tal consumo o, lo que es lo mismo, impide la humanización de lo estético, lo que implica razonarlo. Al fin y al cabo, el ser humano razona por antonomasia. Lo mismo cabe afirmar respecto a la lectura del tema de una pintura: Reconocemos automáticamente las figuras por las semejanzas con las realidades que ellas representan o describen, pero las humanizaríamos si las razonásemos.
El analfabetismo artístico impide, de facto, toda lectura de relaciones de la obra de arte que disfrutamos con sus similares del pasado y del presente. De tal suerte que no atinamos a establecer de donde provienen sus componentes ni cuales son las innovaciones con que es el arte de la pintura. Naturalmente, esta lectura de relaciones es consustancial de todo consumo culto, mas no del goce ingenuo de lo estético ni del mero conocimiento del tema, mediante sus figuras.

1 comentario:

  1. wow, me encantó el artículo! es verdad que hay (habemos) muchos analfabetas artísticos, pero también es verdad que la teoría del arte manejada (al menos en méxico, y más específicamente en hermorrancho)es pobre, caduca y resulta ridícula en nuestros días.
    Gracias por postear esto! Está muy bueno!

    ResponderEliminar